Estos factores se pueden agrupar en los siguientes:
1. Inexistencia de priones de EEB y de virus patógenos en su origen.
2. Producción realizada de forma aséptica, para que de esta forma el contenido de endotoxinas sea mínimo.
3. Producción realizada con el máximo de diligencia, para así evitar la desnaturalización de las proteínas.
4. La mayor cantidad de suero proveniente de fetos de muy temprana edad, los cuales son ricos en «verdaderos» nutrientes fetales o embrionarios. Trinity Tek resalta este cuarto punto.
No necesariamente, para asegurar una buena calidad del suero es necesario que su origen sea libre de priones causantes de EEB y libre de virus causantes de la fiebre aftosa, lengua azul y akabane, entre otros, pero también el suero debe ser correctamente producido en el origen y no solo en el lugar final de procesamiento, sea que éste tenga o no certificaciones ISO.
No, en Australia y Nueva Zelanda hay campañas y controles veterinarios contra el akabane, en los EEUU contra la lengua azul, en Suramérica contra la aftosa y en la UE contra la EEB.
Además del Certificado de Análisis, el certificado esencial es el de la Aprobación de la planta emitido por el DG SANCO, porque éste demuestra que en el país de origen no ha habido presencia de EEB, aftosa, lengua azul y akabane, y que el SBF ha sido producido bajo un Sistema HACCP en cumplimiento del Reglamento (UE) 142/2011.
Es un requisito necesario pero no suficiente, porque la endotoxina solo mide la cantidad de contaminantes presentes en el suero, no el valor de la efectividad de sus proteínas. Puede que haya un suero con bajo nivel de endotoxinas o producido sin contaminantes, pero no producido con la suficiente diligencia que asegure la preservación y la efectividad de sus proteínas.
La hemoglobina no es una sustancia tóxica pues está contenida en los glóbulos rojos para la oxigenación celular. Sin embargo, cuando su presencia es alta tiene el indeseable efecto de teñir el suero de rojo y evita una observación clara del crecimiento celular mediante microscopio.
Mientras menos se congele y descongele el suero mejor será su calidad. Idealmente, el suero debería descongelarse en un principio y en caso de necesidad subdividirlo. La descongelación debe siempre realizarse mediante la inmersión de la botella en agua ligeramente tibia, a la temperatura normal de los mamíferos (por seguridad a no más de 35°C), agitando ligeramente el envase sin llegar a sacudirlo bruscamente.
Mientras el producto no haya sido descongelado por un largo periodo de tiempo, no debe haber ningún problema.
No hay diferencia, es el mismo suero.